Nada tiene que envidiarle la lengua castellana a la inglesa. Sin embargo, en los negocios, las finanzas, la mercadotecnia y la publicidad, la lengua de Shakespeare intenta eclipsar a la lengua de Cervantes.
Y es que en esos ámbitos es muy común encontrarse con préstamos del inglés, o anglicismos.
Veamos un ejemplo en el ámbito de las inversiones:
Puedes formar una “joint venture” con otra empresa o crear una “startup”. Cada vez hay más “business angels”, “family offices” y fondos de “private equity”, “venture capital” o “hedge funds” buscando inversiones rentables. Y si no hay suerte, siempre está la opción de hacer un “crowdfounding”. Recuerda que lo importante es estar alineados con los “partners”.
¿De verdad es necesario recurrir al inglés cuando tenemos léxico de sobra para decir lo mismo?
¿Por qué usamos palabras prestadas del inglés?
¿Por la globalización?
¿Por factores culturales o de estilo?
¿Porque las oímos en el trabajo?
¿Porque están de moda?
Nelson Mandela afirmaba que “si hablas a un hombre en una lengua que entiende, el mensaje llega a su cabeza. Si le hablas en su lengua, le llega a su corazón”
Yo lo sé… no es fácil encontrar equivalencias exactas entre los dos idiomas. Usamos anglicismos porque el conocimiento de cierta disciplina se crea en inglés, porque en ciertos entornos el idioma inglés goza de mayor prestigio, por traducciones deficientes, o porque no existe una palabra apropiada para un término o palabra en específico.
Pero no hace falta tener un máster en “copywriting” para usar anglicismos. Solo debemos escribirlos correctamente en español.
¿Sabías que existen recursos online que permiten consultar las equivalencias en español de todo tipo de palabras y expresiones en inglés?
Una de las instituciones encargadas de regular el uso del español es la Real Academia de la Lengua Española (RAE) o la Fundación del Español Urgente (Fundéu).
Lo que la RAE recomienda es que, como norma general, se modere el uso de anglicismos en nuestros textos.
Aquí algunos de sus consejos:
📌 Conoce a tu audiencia: comprende a quién te diriges y adapta tu mensaje para que les sea comprensible.
📌 Usa alternativas en español: no subestimes el poder de nuestro propio idioma. ¿Para qué utilizar el término "followers" en vez de seguidores? ¿No es lo mismo?
📌 Sé consciente del contexto: evalúa si el uso de anglicismos es apropiado en cada situación y si brinda un valor real a tu mensaje.
📌 Mantén el anglicismo en cursivas si favorece el posicionamiento de tu sitio web en buscadores y es un término especializado.
📌 Si no encuentras un equivalente apropiado en español, escribe el anglicismo en cursiva, y si no puedes usar cursivas (como en este “post”), usa las comillas.
Recuerda: siempre hay una alternativa en español igualmente poderosa disponible. Usa los anglicismos con moderación y estrategia para lograr un impacto duradero.